Celos patológicos y su tratamiento
A menudo oímos decir que unos celos moderados son una demostración de que se quiere a la otra persona, y que siempre que no provoquen malestar (en uno mismo o en el otro) son normales y en cierta medida razonables.
Pero todo el mundo sabe que los celos también pueden ser patológicos cuando generan pensamientos de tipo obsesivo y provocan desconfianza hacia la pareja (siendo la confianza uno de los pilares básicos de una relación) y conflictos en la relación. No sólo eso, sino que pueden afectar a la propia salud y provocar conductas controladoras o incluso violentas.
Desde la perspectiva de la psicología, los celos pueden analizarse utilizando la teoría cognitiva conocida como “esquema A-B-C”, propuesta por Albert Ellis, que se basa en un acontecimiento de activación (A) que da paso a pensamientos distorsionados (B) que terminan desembocando en unas consecuencias (C).
Para los celos, el esquema sería de la siguiente manera:
- Acontecimiento activador: La pareja recibe un mensaje de un/a compañero/a de trabajo.
- Pensamiento distorsionado: Se piensa que la pareja está ligando con esa persona o están teniendo una aventura, y la relación se romperá.
- Consecuencias: Aparece la inseguridad y la sensación de inseguridad, frustración y tristeza, que provocan constantes discusiones o actitudes extremas.
Es obvio que esto no es sano, y provoca que surjan pensamientos que no se ajustan a la realidad, lo que hace surgir la preocupación y esto genera problemas en la relación. Esto hace que se intente controlar demasiado a la pareja, dañando ese pilar tan importante que hemos mencionado que es la confianza. Porque, al fin y al cabo, si nuestra pareja traiciona nuestra confianza no somos nosotros los culpables.
Cómo tratar los celos
Los celos no sólo hacen daño a la pareja y pueden destruir la relación, sino que como ya hemos dicho en casos extremos pueden provocar actitudes de violencia. Por eso, cuando pasan a ser algo patológico y obsesivo no hay que avergonzarse, sino reconocerlo y no tener miedo a ser tratado por un especialista de la psicología.
Lo tratamientos psicológicos para la celopatía no se orientan a hacer desaparecer los celos por completo, ya que en muchos de los casos son parte de la personalidad desconfiada e insegura del sujeto. Se trata de mantenerlos controlados para que no dañen gravemente la relación.
La terapia cognitivo-conductual, orientada a modificar el comportamiento celoso, ha demostrado según diferentes estudios ser de las más exitosas, y otras dos técnicas (la de exposición y la de prevención de respuestas) han dado buenos resultados utilizadas de manera conjunta.